ALGO NO SE NEGOCIA
Algo no se negocia
Por: Darlin Toribio.
No renuncies a tus valores y a tus sueños, aunque firmes Toribio, Medina o Abinader, así quiero iniciar este escrito. No negocies lo que te hace autentico, único y feliz, no hagas acuerdos que laceren tus convicciones.
Abinader no renunció a la oportunidad que ofreció el país de hacerlo el primer mandatario y aunque no recibe un sueldo como tal, disfruta de las mieles del poder, que está por encima de cualquier nómina. A Medina la cúpula de su partido lo eligió presidente del partido fundado por el profesor y este aceptó, me recuerda un poco al Vargas del PRD.
Medina y Abinader han luchado en sus decisiones por poner en primer lugar lo que le ha indicado su conciencia. A los sueños o a los valores, según cómo lo priorice la conciencia de cada uno. Y yo aquí rogando que mis valores y mis sueños se correspondan.
El profesor bien enseñó a sus discípulos la búsqueda del poder para el bien común y aunque éste, en su momento hubo renunciado para evitar alguna desgracia, sus discípulos pueden elegir, querer mostrar una mayor valentía de no abandonar lo que decida la mayoría o una insensatez, de ir siempre por la meta individual olvidando al colectivo. Aunque no fueron palabras del profesor sé que compartiría conmigo la idea de, no renunciar a los valores y a los sueños, respetando el orden mencionado.
¿Qué sería el hombre sin Ética? Es la pregunta de la cual parte un filósofo de Grecia para invitar a reflexionar la vida sin un principio que la rija, su idea termina inclinándose por decir: “Una bestia”. Y yo hoy pregunto: ¿Que es una persona que sueña sin valores? … es una desgracia para sí y para los suyos, lograr nuestras metas siempre nos exigirá un esfuerzo no antes ejercido porque si no ya la habríamos alcanzado.
Es así como ese esfuerzo llegará hasta la moral, que nos invita constantemente a decidir entre “saltar un paso” o seguir la ruta difícil. No sabiendo que ese atajo al final no nos permite disfrutar y vivir de manera plena la meta alcanzada porque en el trayecto hay cosas que debimos asumir.
Si anteponemos los sueños a las virtudes, seremos necios que haremos daños a quienes no queremos y cómo la fruta podrida dañaremos al resto de la canasta. El que sea elegido presidente de un partido puede que en alguna ocasión sea muestra de lealtad de los compañeros, no olvidemos eso, pero si el elegido no es capaz de devolver la misma lealtad que le debe a ellos, este muestra su incapacidad de líder.
Amigos soñemos e incluyamos los valores que siempre nos han regido en ellos, de lo contrario no estaremos cumpliendo nuestros sueños sino los de las circunstancias.
¡No sobrepongas tus sueños a tus valores!
Lic. Darlin Toribio, MA.
Filósofo, profesor, escritor. IG: @darlintoribiov C: Info.escritortoribio@gmail.com